Nada es imposible.

Por Ninoska Lazcano.

Hola primero agradecer a Sindy, por hacerme partícipe de mamá Confidente y poder contar una parte de mi vida.

Comienzo presentándome, mi nombre es Ninoska Lazcano y tengo 38 años, soy madre de tres tesoritos: Florencia de 10 años, Matilda de 7 años, y mi conchito Amalia de 3 años.

Estoy casada hace 10 años con un pololeo de 9 años, tengo un matrimonio soñado, pero no perfecto porque como todos, tenemos altos y bajos. Mi compañero es un hombre apañador, consentidor, cariñoso, trabajador muy preocupado de sus cuatro mujeres.

Ahora les cuento parte de mi historia como hija. Con mucho orgullo puedo decir que soy hija de madre soltera, como sucede mucho en esta sociedad; hombres (como también mujeres), no asumen su paternidad y la tremenda responsabilidad de criar y amar a sus hijos, dejando en completa soledad en los momentos que una mujer más necesita apoyo.

Gracias a Dios en ese tiempo mi madre, una mujer trabajadora y luchadora, vivía con sus padres (mis abuelitos). Ellos le brindaron todo el apoyo emocional e incondicional al momento de quedar embarazada.

Me críe con ellos, hasta que mi mamá logró su independencia, así que crecí con una buena formación de amor, valores y educación. Estoy eternamente agradecida de ellos.

Gracias a esa formación, no tuve carencia afectiva, al momento que necesité de mi Padre biológico, estuvo mi abuelito (mi tata) y mi abuelita (la mami) entregando todo el Amor y apoyo, que un hijo necesita. Lamentablemente hace un año él nos dejó y sigo sintiendo grandemente su partida.

A pesar de toda la experiencia de mi infancia, logré tener mi propia familia, ya que estuvo en su momento el prejuicio de repetir el mismo patrón de mi madre (no faltan los juicios de las personas  ¿verdad?).

Tengo un matrimonio constituido, siempre estuvo en mente tener 3 hijos (ya que fuí hija única) quería una familia grande y logré tener esa familia que me llena de Amor cada día.

Hoy intento no cometer los errores del pasado, luchando día a día por entregarme por completo a mi familia.

Solo me queda agradecer a Dios, nuestro pilar fundamental, sin El nada podríamos haber logrado, todo lo que tenemos hasta hoy como familia.

Un abrazo a tod@s.