Consuelo Aranda Cisternas
No soy escritora, quizás mi título es aterrador, pero aquí voy con todo el corazón!
Antes de saber que estaba embarazada empecé a sentir que debía cuidar mi cuerpo, fue una voz que me advirtió que algo maravilloso estaba por suceder… Jamás cuidé a una guagua, jamás había cambiado un pañal, creo que nunca tuve un papel diferente ni otra responsabilidad más que ser una hija que cumpliera con las expectativas de mis padres. Por lo mismo, siempre estuve alerta a ser una niña estudiosa, responsable, sumisa y ciega de amor hacia ellos…. Cuando dejé de ser su ángel y me convertí en madre me enfrenté a muchas creencias, paradigmas y realidades que no iban con mi nueva vida, mis sentimientos me hicieron descubrir que un hijo es una tremenda responsabilidad, que es una PERSONITA, que merece tanto o más respeto que el que sentiste alguna vez hacia tus padres. Y así nada más tuve en mis brazos a mi mejor logro, a mi mejor creación, a Mis Ángeles en la tierra!!! Ellos creen en mí a ojos cerrados, cuando toman mi mano se sienten seguros, me admiran y preguntan por qué lo sé todo!!! Y yo les respondo, porque la vida me ha dado experiencia y conocimiento, no porque soy un genio, sino que porque es así y ustedes más adelante sabrán aún más que yo!!! Sólo quisiera romper con las cadenas de la crianza antigua, en donde los brazos mal acostumbran y el dar protagonismo y conversar con tu hijo es una locura, quisiera decir que ser su amiga es una bendición, que potenciar sus habilidades sin importar lo que quieran ser los hará felices… Decirles que la vida no tiene porque seguir un orden, que decidir su camino no crea culpas y que cuando quieran abrir sus alas no sientan que es un abandono hacia mí, sino más bien es cuando empiezan a mostrarme que tan grandes, cuidadas y brillantes son, porque mientras más piruetas den el aire y mientras más libres y cómodos se sientan con ellas….. más feliz seré de ser su madre.
Soy su ejemplo, soy su verdad y soy su seguridad, y agradezco a diario que me hayan elegido, ambos!!! Llegaron justo a tiempo!!! A tiempo para soportar el dolor de perder a mi padre, que hasta ese momento resultaba ser el mayor miedo que tenía desde que era una niña. Ese mismo día mi hija, mi Ángel mayor, se enfermó, estuvo horas con fiebre arriba de 40 grados y hospitalizada, me di cuenta que ya la partida de mi papito no era lo más doloroso del mundo, porque el miedo de perder a mi gorda superó todo y mi instinto fue hablando más y más fuerte….
Hace 1 año me separé, hace 10 días el papá de los niños se fue de la casa, pese a que esperé mucho tiempo, intenté todo y di cientos, miles de oportunidades, finalmente no pude seguir con la relación. Viví otro duelo, me desmoroné y sentí una culpa enorme por no poder mantener más la familia unida, sin embargo, y aquí continúa mi agradecimiento, lealtad y admiración, en el momento en que los miré a los ojos y les pedí perdón por hacerlos pasar por este tremendo dolor, ellos me abrazaron, Santi de 3 años me dijo “mamá te adoro, no llores más” y la DO de 6 años me dijo “Mamá tranquila, no es tu culpa”… Gracias por darme la oportunidad de amarlos, de reír con ustedes, de llorar y de abrazarlos. Gracias por ser la razón de mi vida, de mi lucha diaria, por ser mis compañeros y mis guías!!! Gracias por hacerme entender que los niños son seres superiores, que no tienen idea de presidentes, fechas, guerras ni conflictos, pero por Dios como saben amar!!!
Y así queridas amigas fue como dejé de ser un ángel y caí a la tierra, me llené de lodo y me volví un ser animal, que cuida a sus crías de cualquier peligro, de cualquier dolor y me convertí en MADRE, tremendo título!!! Hoy soy una Guerrera, una luchadora, una artista, una actriz, un ejemplo, una mártir .fuerte palabra pero así es, por mis ángeles jamás me rendiré y lucharé hasta que mi cuerpo caiga fatigado. a lo Juana de Arco que dio todo por su país, yo doy todo por mis hijos!!
Consuelo.